viernes, 30 de noviembre de 2007

Otra vez, vamos a fingir que no me importa. Que no me duele, es más, que hasta me da gusto. Vamos a fingir que estoy perfectamente. Que no tengo nostalgia de nada y no me pasa absolutamente nada. Que estoy más feliz que nunca. Vamos tambien a fingir que no me está hirviendo la sangre. Que no tengo ganas de patearlo hasta cansarme o de romperle la cara. Que estas ganas insoportables de vomitar o gritar o llorar o las tres al mismo tiempo no son por consecuencia de -eso-. Fingamos que todo marcha a la perfección.

Y aun asi, no te extraño. Es sólo... la resaca, viste?.

Dile que digo yo que linda blusa verde, donde la compro?

P.D. Y lindo sueter el tuyo.

No hay comentarios.: