sábado, 5 de junio de 2010

No hago amig@s con facilidad, por que usualmente mi semblante inspira precaución o presunción o ambas. No me salen esos trucos circenses de hipocrecía o frivolidad y a veces, casi la mayor parte de mi tiempo, soy poco afectiva. Yo más bien regalo dulces, o me quedo con alguien hasta el final. Fumo, gritoneo, sonrío y me desenvuelvo con tacto y sin remedio. Pero la multitud, como tal, es un muro de prejuicios, de falsas impreciones, de mentiras. La multitud te consume de adentro hacia afuera, si te dejas. Usualmente puedo pasar desapercibida y con notoriedad, además acepto todo, cualquier cosa, con tal de preservar el orden y la secuencia natural de las cosas. No me gusta entrometerme en el cauce del cosmos, no. Yo misma me llego a sentir ajena.
 
Como decía, no hago amistades con facilidad y si consigo afianzar un vinculo, me cuesta mucho soltarlo. Yo respeto mi soledad, y no me molesta. Hasta cierto punto nos llevamos muy bien. Pero es mejor cuando tengo con quien compartirla. Insisto, acepto muchas cosas. Acepto las desiciones de las personas, y a la cifra matemática del rompecabezas paradójico que forma sus personalidades. Ofrezco aquello que puedo dar y mantengo constantes conflictos ontológicos entre mi inseguridad, mi egoismo y mis (agridulces) demonios. Soy, como todos, una caja de pandora en miniatura humana. Recuerdo lo que puedo, lo que no debo y hasta lo que no me concierne, y ni demente cargaré cánceres reminiscentes en mi espalda. Los rencores mudan piel y se hacen pesados, viscosos y horribles. Repito, a riesgo de sonar redundante, que acepto cualquier cosa, tangible o intangible y tan heterea como un sueño mojado. Pero no permito, y en éso soy inquebrantable, que pulverices mi (poca, dificil e inmerecible) incondicionalidad. Y si lo has hecho, que te protejan las ánimas de los arrepentidos, por que por mi parte estás proscrito de mi todo y nada para ésta vida, para las eternidades que condenen a tu espíritu traidor e incluso más allá de todo lo que no concibo en existencias.

No hay comentarios.: